Para lograr “éxito” en el mercado laboral, tomando al
“éxito” como un concepto subjetivo, se debe tener cierto conocimiento en lo
referente al auto-desarrollo de la carrera profesional: Cómo realizar un
currículum, cómo preparar una entrevista de trabajo, cómo lograr cierta
oratoria, conocer nuestras fortalezas y debilidades, cómo escribir informes, mails,
comunicados.
Las fallas en la redacción en los jóvenes , es
manifestada como la pobreza en la comunicación de un informe o un trabajo y
como falla en el estilo, está muy extendida. Las consecuencias son múltiples:
la primera trae consigo una limitación del mundo simbólico, es decir, reduce
los efectos de significados y las posibilidades para el lector de hacer
múltiples lecturas. La segunda, un desinterés por el artículo en cuestión y una
no asimilación de la información que se quiere transmitir.
En una empresa o institución, la redacción como
proceso de comunicación es tomada siempre como una fortaleza, como un rasgo
positivo, al mismo nivel de valoración que un promedio académico, experiencia
laboral, etc., ya que es sinónimo de forma de vincularse con empleadores o
clientes. Es un acto psicológico, social, creativo.
La habilidad para redactar no se aprende por
“ósmosis”, ni es correcto suponerla como una destreza que viene de familia, ni
tampoco nadie escribe lo suficiente como para aprender a redactar por tanteo y
error, si bien la agiliza.
Si se va hacia el terreno de las idealizaciones, la redacción como herramienta del “éxito” laboral debería enseñarse a través de una enseñanza formal. Reglas ortográficas, uso de sinónimos y antónimos, estilo, creatividad (para atraer al lector) deberían enseñarse para nuestra práctica profesional. Como por ejemplo, al escribir una introducción o un análisis de un trabajo, debes leer y entender acerca de lo que se va a tratar, haciéndose preguntas referente a lo leído, realizando bosquejos, identificando la idea principal o subrayando, para que de este modo se tenga una idea de lo que se quiere transmitir en la redacción y sea compresible tanto para la persona como para los demás.
La redacción no es solo un mecanismo de transmisión de
información técnica, científica o comercial; trae siempre consigo un
pensamiento, ayuda también a desarrollarlo.
Fuente: Importancia de la redacción. [on-line].
Disponible en: http://www.fcagr.unr.edu.ar/Extension/Agromensajes/28/13AM28.htm
Fuente: Importancia de la redacción. [on-line].
Disponible en: http://www.fcagr.unr.edu.ar/Extension/Agromensajes/28/13AM28.htm